Ingredientes:
(4-5 raciones individuales).
Para el postre:
- 1 taza de leche.
- 1 yogur natural.
- 4 fresas.
- 2 cucharadas de azúcar blanco.
- 5 láminas de gelatina neutra.
Para el sirope:
- 4-5 fresas (una por cada recipiente individual).
- Azúcar al gusto.
Preparación:
El postre:
Lavamos y troceamos las fresas, extrayéndoles la parte de las hojas.
En un vaso de batidora, introducimos las fresas troceadas, la leche y el azúcar. Batimos hasta que no queden trozos de fresas , teniendo cuidado de no generar mucha espuma.
Vertemos el batido en un cazo y calentamos a fuego lento. Cuando comience a humear y antes de que rompa a hervir, retiramos el cazo del fuego y añadimos las láminas de gelatina una por una, removiendo con constancia (no agregaremos la siguiente hasta que no se haya disuelto la anterior).
Volvemos a poner en cazo a fuego lento hasta que eche humo, retiramos del fuego, incorporamos el yogur y mezclamos.
Sólo nos queda repartirlo en varios recipientes, o en uno grande, y refrigerarlo en la nevera durante 1 hora y media como mínimo (cuanto más horas lo refrigeremos, mejor).
El sirope:
Cortamos las fresas en trozos pequeños y las pasamos por la batidora. Agregamos un poco de azúcar al gusto, mezclamos y listo. Incorporaremos el sirope una vez que la gelatina ya esté cuajada.