Ingredientes:
- 400 gr. de garbanzos cocidos.
- 2 huevos.
- 1/2 taza de leche.
- 2 dientes de ajo.
- 1 manojo de perejil.
- 2 rebanadas de pan duro.
- 1 plato de harina de trigo.
- 1 cucharadita de sal.
- Pimienta molida.
- Nuez moscada.
- Aceite para freír.
Preparación:
Salteamos unos minutos el pan duro troceado junto a los dientes de ajo enteros y con cáscara, en una sartén con un poco de aceite de oliva hasta que comiencen a dorarse.
Colocamos el pan y los ajos en recipiente de la batidora y veremos los huevos batidos y la leche. Mezclamos y esperamos a que el pan se empape y se vuelva blando.
Escurrimos lo garbanzos lo máximo posible y los añadimos al baso de la batidora. Agregamos también las hojas de perejil, la sal, una pizca de pimienta molida y una pizca de nuez moscada. Trituramos todo y corregimos de sal o especias si fuera necesario.
Reposamos la masa media hora en la nevera para que tome consistencia y sabor.
Sacamos la masa de la nevera, vamos formando bolas con las manos limpia y las pasamos por la harina. Calentamos abundante aceite en una sartén y doramos las albóndigas enharidas cuando el aceite esté bien caliente. Colocamos las albóndigas sobre papel de cocina para que absorban el aceite que puedan tener.
Tan sólo nos quedaría cocinarlas un poco en la salsa que queramos.
Notas / Variantes:
Podemos suprimir la nuez moscada y/o añadir otras especias, dependiendo del sabor de la salsa que escojamos.
2 comentarios
comentariosQué ricas, así como al estilo del falafel, fácil y sano :) Una idea muy buena para comer más legumbres.
ResponderFeliz martes!
Me alegra que te gusten, no están nada mal y cocinadas en salsa aún mejores! También son perfectas para los vegetarianos. Un beso!
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