Ingredientes:
(10-15 croquetas aprox.).
- Una pechuga de pollo entera.
- 1 cebolla pequeña.
- 500 ml. de leche.
- 4 cucharadas colmadas de harina de trigo.
- 1 huevo.
- Pan rallado.
- Nuez moscada.
- Sal y pimienta molida.
- Aceite de oliva.
Preparación:
Comenzaremos cocinando el pollo, que habrá que tenerlo hecho antes de preparar la mas de las croquetas. La manera más rápida y fácil de cocinar un pollo para croquetas es de la manera que voy a explicar a continuación, aunque siempre lo podemos cocinar de la forma que más nos guste, por ejemplo cocido o asado.
Picamos la cebolla pequeña y troceamos el pollo en dados, también pequeños. Calentamos un poco de aceite en una sartén a fuego medio e incorporamos la cebolla. Cuando esté trasparente o pochada, añadimos el pollo en dados y cocinamos unos 10 minutos, hasta que el pollo esté hecho. Lo pasamos a un plato y reservamos.
Agregamos 3 cucharadas de aceite en la misma sartén, calentamos un poco y añadimos las 4 cucharadas de harina. Cocinamos durante un minuto removiendo hasta que quede ligeramente tostada. Retiramos del fuego y añadimos un poco de leche (1/2 vaso), una pizca de sal, pimienta molida y nuez moscada. Mezclamos bien y volvemos a poner la sartén al fuego. A partir de este momento, iremos mezclado y añadiendo un poco de leche cada vez que espese la mezcla. Es muy importante no parar de remover para que no nos queden grumos y obtengamos una bechamel cremosa.
Una vez ya tengamos lista la bechamel, incorporamos el pollo con cebolla que teníamos reservado y mezclamos. Retiramos del fuego, tapamos la sartén y dejamos enfriar la masa para poder manipularla fácilmente.
Preparamos un plato hondo con un huevo batido y otro con pan rallado. Una vez fría la masa, vamos cogiendo porciones con las manos y le damos forma de croqueta. Pasamos por el huevo batido y luego por el pan rallado.
Podemos freír las croquetas enseguida o congelarlas para consumirlas otros días.
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